¿Puede afectar tu divorcio a tu permiso de residencia en España?

La ruptura de una relación siempre es una situación que genera estrés en ambos miembros de la pareja. Después de haber pasado buenos momentos siempre es amargo tener que empezar una nueva vida desde cero. Si encima la ruptura se produce en un matrimonio la situación se complica más ya que genera una serie de implicaciones legales y burocráticas. Y si uno de los miembros que solicita el divorcio es de acionalidad extranjera entonces el caso es aún más complicado.

Divorciarse de tu pareja española no implica necesariamente que pierdas tu derecho de residencia en España. Para ayudarte con tus trámites en estos momentos difíciles y de un gran estrés emocional, queremos guiarte sobre los pasos que debes tomar para poder seguir residiendo en España sin ningún tipo de problema.

El divorcio en España

Antes de hablar de cómo el divorcio puede afectar a tu permiso de residencia en España centrémonos brevemente en hablar del divorcio en España. La primera referencia al divorcio en España data del Fuero Juzgo de los visigodos. Tras varias legalizaciones y posteriores revocaciones, el divorcio quedó establecido en España en el año 1981. Su proclamación fue muy polémica y contó con el rechazo de la Iglesia católica.

En el año 2005 la ley fue renovada para ser conocida popularmente como “Divorcio Express”. Desde ese año no es necesario una separación previa ni alegar ningún motivo para consumar el divorcio. Bastará con haber pasado 3 meses después de la boda para poder solicitarlo. Además, con la agilización de los trámites, se consigue un ahorro de costes para las personas que solicitan el divorcio. En el caso de contar con hijos se puede solicitar la custodia compartida, hasta entonces no recogida en la ley de 1981.

Cómo divorciarse en España y cuánto cuesta

Si estás pensando en divorciarte en España el proceso es relativamente sencillo. Muchos despachos ofrecen este servicio online para que lo puedas tramitar sin tener que acudir físicamente a un bufete de abogados. Si no conoces ningún abogado puedes buscar a través de directorios especializados, como UNAES, Abogading o Unabogado.es.

El precio variará en función de nuestra situación personal. Los divorcios entre cónyuges sin patrimonio compartido ni hijos suelen ser más sencillos que los que tienen estos componentes. Si las partes están además de acuerdo en los términos es mucho más económico. Si no hay mutuo acuerdo entonces es necesario un divorcio contencioso que duplica los trámites y alarga el proceso de ejecución, añadiendo además un mayor estrés en la relación.

Respecto a los papeles necesarios que se deben aportar están:

• Certificado de Matrimonio 
• Certificado de Nacimiento de los hijos (si los hubiere) 
• Poder General para Pleitos (para que el abogado pueda actuar en nuestro nombre)
• Documentos económicos (si aplicasen) 
• Certificado de empadronamiento
• Propuesta de convenio regulador

Consecuencias de divorciarse siendo extranjero

En caso de que uno de los cónyuges sea extranjero de un país que no sea miembro de la Unión Europea, su permiso de residencia en España puede verse afectado. Esto solo aplica en el caso del divorcio. Si la pareja decide simplemente separarse no existe un cambio en la situación del régimen conyugal. En otras palabras, no sería necesario realizar ningún trámite en caso de separación.

En algunos casos el divorcio no implica ningún cambio en la situación legal del inmigrante. Estos casos son los siguientes:

• Si el matrimonio ha tenido una duración de tres años o más (hasta el inicio del proceso de divorcio) y uno de esos años se ha residido en España.
• La existencia de hijos cuya custodia sea compartida, recaiga exclusivamente en la persona de otra nacionalidad o exista un régimen de visitas a los hijos.
• Que exista pruebas de que hayan tenido lugar episodios de violencia doméstica.
• Haber sido víctima de trata de seres humanos.

Para acreditar cualquiera de estos supuestos la persona debe acudir a su Oficina de Extranjería en un plazo no superior a los 3 meses desde el divorcio.

Cómo afecta mi divorcio al permiso de residencia de terceros

Las consecuencias de nuestro divorcio no solo nos alcanzan a nosotros, sino que también llegan a las personas de nuestro entorno. Por ejemplo, si alguno de nuestros padres ha venido a España aduciendo ser progenitor de un cónyuge de nacionalidad comunitaria, deberá realizar una petición de autorización de residencia o residencia y trabajo. Incluso si la persona está dentro de uno de los supuestos previamente explicados.

Qué pasa si no entro en uno de los supuestos anteriores

En el caso de aquellas personas que no entran dentro de uno de los supuestos especificados previamente, deberá realizar la petición de un nuevo permiso de residencia siguiendo los pasos normales para este tipo de trámites.

El plazo que contará esta persona para solicitar dicho trámite es de 6 meses.

Si el extranjero cuenta con cinco años o más de residencia legal en España entonces podrá optar a la Residencia de Larga Duración. En caso contrario deberá optar por una Residencia Temporal, que podrás ser con trabajo si está dado de alta en la Seguridad Social.

Comunicar el cambio de régimen conyugal en el país de origen

Independientemente de que el matrimonio se haya cancelado en España es importante destacar que es responsabilidad de los cónyuges notificar en su país de origen el cambio de su situación conyugal. Por lo tanto, debe ser el propio interesado o interesada quien realice los trámites correspondientes para procesar esa notificación.

Es importante destacar que la ley que se aplicará a la hora de ejecutar el divorcio será la del país de residencia, en este caso España. Si se decide que uno de los progenitores debe pagar una pensión para la manutención de los hijos, aunque el cónyuge vuelva a su país de origen, debe seguir cumpliendo con sus obligaciones económicas.

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