Últimas amenazas a la Ciberseguridad en España

Si hay algo que no descansa en ninguna época del año son las amenazas a la ciberseguridad. Da igual que estemos en Navidades o en verano. Que acabemos de empezar las clases o que estemos en plena temporada de rebajas. Los ataques maliciosos a nuestros dispositivos electrónicos suponen siempre una amenaza constante a nuestra seguridad. No es la primera vez que os hablamos de los riesgos que tenemos en este campo. Pero como los trucos avanzan a la vez que lo hace la tecnología, hoy queremos dar un breve repaso a las últimas amenazas a la ciberseguridad en España, para que puedas evitar caer en uno de estos sistemas fraudulentos.

El informe Proofpoint

Una forma de estar al tanto de cuáles son las últimas tendencias en ciberataques es a través de los informes trimestrales que publica Proofpoint. Esta compañía especializada en el campo de la ciberseguridad analiza aquellas técnicas más usadas, a la vez que las filtra por regiones. Está bien saber el estado general de las cosas en el mundo, pero es muy interesante conocer cuáles son las principales amenazas a las que se enfrentan los ciudadanos de un determinado territorio. Durante los últimos meses hemos asistido a nuevas versiones de troyanos, extorsiones y ransomware que han puesto en jaque nuestra seguridad. España, como otros países occidentales, es uno de los objetivos preferidos por los hackers que buscan conseguir información con la que luego poder cometer sus delitos. Pero… ¿cuáles son las últimas técnicas más usadas?

Emotet, un viejo conocido

Dentro de las principales amenazas a las que nos enfrentamos en España está Emotet. Este troyano es un viejo conocido, que parece haber vuelto con una especial fuerza en nuestro país. Como todo troyano, tiene un objetivo claro: conseguir acceder a nuestro sistema para conseguir información sensible. En el caso de Emotet, su foco está en conseguir acceder a información financiera. Por ejemplo, nuestros datos bancarios. La técnica es bastante sencilla: intenta replicar un correo legítimo de uno de nuestros contactos o empresas con las que tenemos algún contrato, adjuntando un enlace o fichero que debemos abrir. Los asuntos de los correos suelen ser bastante concisos. “Estado de Pedido”, “Actualización” o “Privacidad” suelen ser algunos de los términos más usados. Lo peor es que, si se infecta nuestro sistema, podrá acceder a la información de nuestra agenda de contactos, por lo que estaremos comprometiendo la seguridad de nuestros conocidos y contribuyendo a su propagación.

La sextorsión, una tendencia en alta

Entre las últimas tendencias de fraude y crimen online está la sextorsión. Con este término que une los vocablos sexo y extorsión, se hace referencia al chantaje que muchas personas sufren por parte de conocidos y desconocidos. Las víctimas son amenazadas con difundir imágenes o vídeos de tipo sexual si no se paga una determinada cantidad de dinero. Entre sus últimas víctimas más conocidas está el exentrenador del Málaga Victor Sánchez del Amo. En este tipo de delito hay dos variantes. La primera es en la que no existe ningún tipo de contenido, pero la víctima potencial recibe un mensaje en el que se le amenaza con difundir imágenes o vídeos si no realiza un pago de dinero. El segundo caso, más peligroso, es cuando sí existe el material, por lo que el estrés que sufre la víctima es mucho mayor. En ambos casos la policía recomienda que nunca se pague dinero. Como todo chantaje, no acaba cuando se realiza el pago. La víctima seguirá recibiendo de forma periódica nuevas solicitudes de dinero. Si estamos seguros de que ese material existe la policía siempre recomienda imponer una denuncia. En muchos casos las víctimas no suelen hacerlo por vergüenza o para evitar que se sepa la existencia de una relación que, frecuentemente, es extramatrimonial. La policía también ruega que, bajo ninguna circunstancia, compartamos imágenes de carácter sexual o provocativas. Una vez que enviamos esas fotografías o vídeos perdemos el control de estas. Y esa persona que las recibe, que hoy puede ser una gran amistad, en el futuro puede convertirse en nuestra peor pesadilla.

Los RATs siguen en aumento

Entre las principales amenazas siguen estando los RATs. Con este acrónimo derivado de los términos Remote Administration Tool nos referimos a esos programas, que una vez instalados en nuestros equipos, hacen que perdamos el control de nuestros dispositivos. Por ejemplo, pueden activar nuestra webcam sin que nosotros seamos conscientes de que está activa. En el peor de los casos la situación puede acabar en un caso de ransonware. Es decir, el delincuente toma control completo de nuestro ordenador y nos bloquea. Para que podamos realizar un desbloqueo pedirá, como no, una cantidad de dinero. El modo en le que estos programas se instalan en nuestro equipo es similar al del caso de los troyanos. Simulan notificaciones de empresas o contactos para que, cuando accedamos a un determinado sitio, puedan instalarte en nuestro equipo.

Vulnerabilidad en software no actualizado

Como decíamos antes, al paso que avanza la tecnología lo hace también las herramientas que buscan acceder a nuestros sistemas. Por eso muchas compañías están en continua actualización de su software: el equipo operativo de nuestros ordenadores, nuestros teléfonos, las herramientas y programas instalados… Mantener todos nuestros dispositivos al día es la mejor manera de contar con una protección adecuada. No es posible garantizar el 100% de la seguridad. Pero, al menos, contaremos con las herramientas precisas para asegurar un buen punto de partida. El compromiso Small World con la seguridad Para Small World la seguridad de nuestros usuarios es nuestra máxima prioridad. Cumplimos con los estándares marcados por la Unión Europea para garantizar un buen servicio a todas las personas que envían dinero a través de nuestra plataforma. Además contamos con una sección en nuestra página web en la que advertimos a nuestros usuarios de cómo luchar contra el fraude. Te aconsejamos que le eches un vistazo si no lo has hecho todavía para que evites ser víctima de las técnicas más comunes entre defraudadores.